España y un francés socialdemócrata

Como todo el mundo sabe un socialdemócrata francés ha ganado las elecciones presidenciales en Francia. Y como no podía ser menos los afrancesados patrios aprovechan para asomar la cabecita una vez más. No hemos olvidado que en 2010, Bicentenario de la Guerra de la Independencia, desde el gobierno de España, la vicepresidenta Mª Teresa Fernández de la Vega rindió homenaje y tuvo un sentido recuerdo…para los afrancesados españoles!

¡Estamos salvados! ¡Vuelve la socialdemocracia! ¡Francia marca el paso en Europa! Y ni corto ni perezoso el señor Rubalcaba se nos envuelve en la tricolor para celebrar el triunfo electoral de su correligionario cuando jamás le veremos celebrando nada con una rojigualda, no vaya a ser que parezca demasiado españolista. Si en Francia ser afrancesado en cuestión de Estado, en España ser afrancesado es el estado inercial todo buen progresista e ilustrado que se precie . El entusiasmo se desata entre los políticos, ideólogos, opinadores y plumillas de la socialdemocracia española; se afirma incluso que hasta el gobierno y el PP deberían estar satisfechos con el resultados en Francia, pues se abre una nueva etapa de prosperidad, estado del bienestar y cambio de rumbo en la política europea respecto a las nefastas políticas de austeridad que ha impuesto a toda Europa  la canciller alemana y su, hasta ahora, adlátere Sarkozy. Albricias! la socialdemocracia renace de sus cenizas en Francia, en Europa y eso traerá innumerables parabienes también para España. Todos a una: Allons enfants de la Patrie…

Desde la parte España, desde Izquierda Hispánica  no podemos sino contemplar con repudio esta reacción de alegría infantil pero  en el fondo de mala fe del afrancesado. Y ¿por qué se nos dirá? Veamos. En primer lugar Francia, desde el punto de vista de su interés nacional, no es un país degenerado y corrompido como España. Desde el Partido Comunista Francés hasta el Frente Nacional, desde los socialdemócratas hasta liberal-conservadores tienen claro que la prioridad política es Francia, después Francia y en tercer lugar Francia. La república una e indivisa y su interés nacional es política de Estado en Francia. La grandeur de la France. Y hacen bien y en esto no podemos dejar de sentir una envidia sana. Siendo esto así, lo principal y lo importante sobre lo que queremos llamar la atención para desengaño de despistados y para desenmascarar a embozados afrancesados,  es que el interés de Francia pasa, entre otras cosas, por tener a España como país subordinado a los intereses franceses. Francia no se puede permitir que España le haga sombra en el Mediterráneo ni respecto a los países del norte de África ni respecto a la política europea. Es más, si pueden debilitar la posición de España respecto a Iberoamérica no perderán ocasión. Esta situación internacional es así desde siglos y la papilla europeísta servida por la partitocracia y sus plumillas durante estos últimos años no pueden  ocultar esta realidad política, esta realpolitik. No se trata de maldad congénita del francés, ni de envidia hacia España ni de ninguna otra categoría psicologista o moralista; se trata de política en lo que afecta a la lucha entre Estados por su interés nacional y buen gobierno. Obviamos las referencias históricas en las que nos apoyamos suponiendo que cualquier persona con el Bachiller finalizado las conocerá en lo esencial. Sepa el ingenuo europeista que la política de un imperio o una gran potencia está mucho más determinada por sus intereses geoestratégicos a largo plazo que por el buen o mal talante del gobernante de turno. No se dejará de apreciar que con el francés se esta dando a escala europea una situación similar al papanatismo  que acompañó la elección de Barack Omaba como presidente de los EEUU a escala planetaria.

Pero es que resulta que además de francés es socialdemócrata!. Y qué podríamos decir que no se haya dicho ya acerca de la historia de mentiras, imposturas y  traiciones que jalonan la historia de la socialdemocracia europea y francesa en particular….De la socialdemocracia española ya ni hablamos.

Conocemos de sobra y sobrados estamos de políticos españoles afrancesados ¿Conoce alguien algún político francés españolista?

 

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