En estos días cualquiera que siga las tertulias radiofónicas y televisivas habrá podido observar que el asunto del rescate de la economía española, eufemismo para referirse a poner a la economía española al servicio de intereses ajenos, está de rabiosa actualidad.
Y es que los tertulianos ideólogos llamados a filas por la sección progresista de la partitocracia repiten la consigna que su buque insignia de cabecera ha puesto en circulación en estos días: hay que solicitar el rescate cuanto antes y ello conlleva ajustes y medidas dolorosas como la rebaja de las pensiones. Efectivamente el conglomerado político-empresarial y financiero articulado en torno al Grupo PRISA, conocido como el Prisoe, por su estrecha vinculación con el PSOE, ha perpetrado una serie de tres artículos donde expone con total impunidad y desvergüenza el peligro que supone tal conglomerado de intereses para la viabilidad de España. En uno de ellos repite los argumentos conocidos del régimen sobre las bondades del sistema autonómico, en otro justifica e insta al gobierno a recortar las pensiones y aumentar la edad de jubilación. En el primero de ellos, el más infame de todos, insta, como decimos arriba, al rescate de España, soportando los españolitos lo que las potencias depredadoras de la UE tengan a bien imponernos ya que las reglas del juego son conocidas: cada ayuda pública europea, sea una intervención directa o en el mercado de deuda, acarrea contrapartidas de ajustes y reformas que tiene que cumplir la economía socorrida. Y a la defensa de esta indignidad se entrega abnegadamente este grupo de iletrados pedantes y traidores que no tienen más patria que los intereses del Grupo PRISA y su conglomerado ideológico, repitiendo por las ondas, columnas periodísticas y tertulias televisivas las bondades del rescate y la supeditación a Europa ya que siempre hemos defendido que todo ello no supone en modo alguno una pérdida de soberanía, sino el ejercicio compartido de ésta en un contexto de creciente integración europea.
No sólo la unidad sino que la identidad de España como nación política bajo un proyecto de socialismo iberoamericano queda comprometida por la existencia de este grupo de intereses. Por eso Izquierda Hispánica tiene en el Grupo PRISA y su conglomerado ideológico uno de sus principales enemigos.
Éste es el artículo de El País al que se refiere el texto:
http://elpais.com/elpais/2012/12/09/opinion/1355077062_948109.html
Hola
Gracias por tu comentario y enlace.
Saludos
Estimados camaradas de Izquierda Hispánica. Me permito remitiros un enlace al artículo Europa: el vampiro ilusionista. Los Pueblos hispánicos seducidos por su tradicional archi-enemigo. Se trata de un artículo publicado en Diario Unidad y en la Revista Pensamiento del Sur, medios de cuya asesoría participo.
http://www.diariounidad.es/index.php?option=com_content&view=article&id=391:tamer-sarkis-fernandez-europa-el-vampiro-ilusionista&catid=110&Itemid=609
Reproduzco aquí un fragmento esclarecedor:
Bajo el IV Reich, cuanto más oprimido se halla el esclavo español, más dependiente es respecto de sus propios secuestradores, y así con mayor urgencia necesita ser “salvado” por bomberos incendiarios, y así, en fin, más crédulo se vuelve y más febriles, más continuos y más suspirantes son sus sueños con el Amo. Esta secuencia supone radical cumplimiento de la tesis hegeliana llamada “dialéctica del Amo y el esclavo”, impresa hoy en camisetas abanderadas de los Estados Unidos o de Alemania, luciendo sobre el cuerpo de nuestros jóvenes y no tan jóvenes.
O identificamos esta misma dialéctica presidiendo las millonarias audiencias atentas a programas televisivos de “agradecimiento” a las bondades tenidas por los supuestos “amortiguadores” de nuestra mala cabeza y mala sangre. O la oímos a través de comentarios televisivos y radiofónicos, de “documentales”…, mostrando como “nuestro problema” la “carencia de Europa”. Y así también en el cine devocionado, la estética, la moda, los iconos, los líderes de opinión, etc. Quien produce como pesadilla la Realidad del esclavo, deviene ideal con el que comulgar y fundirse, fuente de admiración, emulación y confianza, al exhibir a ojos del esclavo el poderío parasitario que atesora, y al depender realmente el esclavo respecto de su mano tendida “benevolente”.
Como se clamaba en los Pronunciamientos patriótico-progresivos, ¡Viva España con honra!. Saludos comunistas.