Pepe Griñán impone la austeridad. ¿Qué es eso de imponer lentejas o habichuelas?

A los niños de los colegios... Tranquilos, propietarios de restaurantes y hoteles de 5 estrellas, los socialistas siguen: I love pata negra, centollos y las mejores carnes de la Pampa. Hay mucho socialismo en Andalucía y los langostinos de Sanlúcar son del PSOE.

 

Pero nuestro héroe, “Pepe”, no quiere que los niños andaluces “coman a la carta”. La “carta” del leader andalusí son lentejas, habichuelas, garbanzos, tomates... Eso pasa por no haber pasado por una escuela pública hace 500 años, cuando los socialistas apoyaban las sublevaciones moriscas de las Alpujarras contra el Rey Católico y Español.

 

Descanse en el Ramadán o después el Islam, que los niños musulmanes no se verán sometidos a la “dieta fría”. Eso es para españoles. Las escuelas privadas, donde no hay un solo hijo de los socialistas, porque ellos adoran la escuela pública y son coherentes hasta la muerte, tampoco se verán afectadas. El socialismo español, y el andaluz, rozan la perfección: son austeros como Pablo Iglesias, comen lo justo y no atacan el impío alcohol. Detestan lo privado, el capitalismo, las escuelas religiosas, los uniformes pijos y de derechas. No busquen un hijo de socialista en escuelas “fascistas”. Si así fuese, es un error del colegio o usted está trastornado.

 

Prosigan las empresas adjudicatarias de la “dieta fría”. En pleno recorte del gasto público, los socialistas saben ser “amigos”. Pongan, como los ahora “amigos” americanos, unos colorcitos, cuatro globos, un gorro del PSOE, en la dieta fría y los niños serán felices. Comer no comerán, pero estarán monísimos con el careto de Hussein Obama.

 

Los padres sólo saben protestar. Menos mal que “Pepe” es enérgico, un hombre de “profundas convicciones”, un hombre de Estado. Corre un trágico rumor: hay quien murmura que le ha oído un pensamiento propio. ¡Pelillos a la mar! Serán del PP.

 

Nuestra portentosa Junta de Andalucía ha estudiado todo. Todo. Científicamente ha demostrado que cuatro bocatas contienen alimentos más completos que las lentejas o los garbanzos. ¡Eso era de la Dictadura! Cuando Franco, se comía autárquicamente. Now el moderno socialismo, dirigido por el abuelete Pepe, representa a la Modernidad.

 

Los padres no entienden: ¡es necesario recortar gastos! Pregunta: ¿votan los niños/as de 5 a 12 años? No, es la respuesta. Por otra parte, estos intransigentes progenitores A o B, no quieren comprender que el dinero de la Dieta Fría debe orientarse hacia fines más nobles. Desesperadamente no abrazan el Progreso. Los fondos de las habichuelas (evitamos lo de "judías", aunque al PSOE le gustaría) son para enseñar a los niños/as el cuerpo “humano”. ¿Cuánto dolor y futuro trastorno mental se esconde si un alumno de 10 años no sabe hacer sexo oral o masturbarse como Dios manda, con perdón? No se puede hacer política con estos ignorantes de los papás. Son como el Motín de Esquilache. No se les mete en la cabeza. Un niño con tanga o una niña con un colt 45 vale más que todas las lentejas, espaguetis, lechugas o tomates de la Dictadura Franquista.

 

¡Reaccionarios!